Ya
comenté en este mismo blog mis impresiones sobre el comic de Usagi Yojimbo,
hasta el momento conocido por mi como “el conejo samurai ese” y cuan magistral
obra de arte me había parecido. Y como suele pasar en estos casos, recibí
varios comentarios, especialmente en G+ donde además de instigarme a seguir
gastando dinero en esta serie, me informaban de que existía un juego de rol, ya
descatalogado, del mismo. Ya no pude dormir por las noches.
Encontrar
el juego en tiendas era aparentemente imposible a pesar de que en su día lo
publicara una editorial todavía activa como es Nosolorol, así que tuve que
introducirme en los bajos fondos ebayisticos y todocoleccionisticos y viendo
que ni así, decidí adentrarme en el oscuro mundo del wallapop, donde igual te
piden 500€ por un boli bic normal como intentan ligar contigo descaradamente. Y
allí estaba, en manos de un señor que lo vendía a un precio irrisorio y
aparentemente en perfecto estado me pude hacer con el libro que voy a comentar
hoy:
Usagi
Yojimbo, el juego de rol.
El
libro tiene 200 páginas, tapa blanda y tamaño estándar con interior en blanco y
negro y maquetación a doble columna con numerosas ilustraciones sacadas
directamente de los comics. La portada es muy sencilla y muestra a Usagi con la
espada en alto y la luna llena de fondo y curiosamente no dice nada de “juego
de rol” ni qué vamos a encontrar en el interior. En el lomo sí que lo indica y
la contraportada tiene un breve texto en el que explica un poco de qué va eso
de los juegos de rol y que parece dirigido a los seguidores de los comics del
conejo espadachín. Fue publicado en 2006 y en la primera página hay un bichito
chafado, aunque sospecho que ese detalle es exclusivo de mi ejemplar.
La
primera parte del libro tras la necesaria explicación de qué es un juego de rol
y qué es eso de Usagi Yojimbo es la dedicada al trasfondo, historia y geografía
de Japón. Para quien no lo sepa, la historia de Usagi se desarrolla en el Japón
histórico, basándose en la historia real pero dejándose llevar también por los
mitos y leyendas, consiguiendo un equilibrio entre historia y fantasía que
seria mas cercano al “Tierra de ninjas” de RuneQuest que a “La leyenda de los
cinco anillos”, por ejemplo. Luego tenemos una lista de los principales
personajes que aparecen en la serie y ya vamos a la creación de personajes.
Me
gustan los juegos que colocan la creación de pjs después del trasfondo y antes
de las reglas. Me dan confianza, no sé. Creo que es muy acertado que los
jugadores conozcan el mundo en el que se van a mover, luego elijan quiénes
quieren ser y finalmente aprendan las mecánicas del juego, ya que así se evita
el munchkineo (o como se diga) y se facilita la inmersión ambiental (toma ya).
En el
caso de este juego nos dan a elegir los atributos básicos (Cuerpo, Mente,
Voluntad y Velocidad), elegir la raza entre una gran variedad de animalitos,
una profesión, habilidades, dones (una especie de habilidades especiales de uso
limitado en algunos casos) y equipo.
El
apartado de reglas es tan sencillo como curioso pues las tiradas se realizarán
con dados mayores cuanto mayor sea la habilidad a usar, sumando dados
adicionales por habilidad excepcional, atributos, carrera, dones… de modo que
en uan misma tirada podremos lanzar gran cantidad de dados de distintas caras,
pero no sumándolos si no eligiendo el mayor resultado. De igual modo se aplica
en el combate (cuyas reglas son bastante más extensas y no voy a resumir aquí)
y en las tiradas enfrentadas. A falta de probarlo en mesa podría apostar a que
resulta cuanto menos, divertido.
Finalmente
vienen las reglas de recuperación de heridas y dones, de creación de
escenarios, listado de armas y como no, una aventura introductoria e ideas para
crear las propias. Y como curiosidad final, una decena de hojas de personaje
creadas y que representan a los personajes protagonistas del comic, incluyendo
a Usagi por supuesto, así como un resumen de tableas.
En
resumen y sin querer profundizar mucho en un juego que todavía no he tenido
ocasión de probar, me parece un juego interesante, simple, simpático y que da
al director la posibilidad de jugar las mismas aventuras del tebeo con los
protagonistas originales o crear tramas complejas utilizando la gran cantidad
de información del principio del libro.
Valoración
final: Mola.