El
motivo de esta entrada no es hacer una reseña ni una reflexión lúdica ni una de
esas anécdotas tan graciosas de cosas que parece como que me las invento pero
no. El motivo de haberme puesto a escribir después de tanto tiempo es
precisamente el de pedir disculpas por haber estado tanto tiempo sin escribir aquí.
Y recalco lo de “aquí”.
Y ahora
os podría contar que los blogs ya no son lo que eran, que la gente no los lee,
que el mío menos aún, que mis libros, que el canal de youtube que no ve nadie, que
la familia y el trabajo y el calor y que se me ha roto el portátil y en verano
estoy sin teclado… Pero voy a dejarme de excusas y resumir las cosas buenas,
relacionadas con este hobby que estoy haciendo aunque no las cuente.
En
primer lugar tengo los juegos de rol. Juego poco y como puedo, pero ahí voy resistiendo.
De momento he logrado reunir a un grupo semifijo para jugar una partida
semimensual estilo sandbox que he tenido la osadía d ellamar “pizza&rol”. Con
la excusa de comer pizza nos reunimos una vez al mes (siempre intento que sea
algo menos) para jugar. ¿Y a qué jugamos? Pues nada más ni nada menos que a
Eldarad, ese suplemento tan injustamente denostado del viejo RQ de Joc, eso sí
con las reglas de La sombra del rey demonio, que es un juego que me mola y es más
mejor para con los nuevos jugadores que empezar a cortarles brazos con mi
querido RQ.
Por
otro lado y sin dejar el rol, tengo una campaña lista para jugar con mi pequeña
de 50 Brazas (Savage Worlds) que estoy seguro de que le gustará y a mi me
ayudará a dominar un poco ese sistema que he de reconocer que no tiene tantísimos
adeptos por casualidad.
En
segundo lugar sigo dándole (aunque menos) a los juegos de tablero. Tengo alguna
nueva adquisición de la que hablaré en breve porque merece una entrada a parte,
viejos juegos que he desempolvado y como no, ganas de descubrir cosas nuevas.
También
he descubierto un nuevo juego de cartas (solo tiene 20 años) y aunque nunca
salió en español, todavía se puede encontrar a buen precio en ebayes y demás y
me gustaría tener y probar. ¿No sabéis cual es? Pues el Shadowfist, un juego de
artes marciales basado en mi querido Feng Shui (o quizás fuera al revés) que
solo por su temática ya merece la pena probar.
¿Y qué
más? He vuelto a tener algún breve escarceo con el Warhammer que me ha hecho
venir las ganas de pintar minis otra vez, estoy montando algo de escenografía,
viendo pelis de chinos, leyendo rol, escribiendo mis cosas, peleándome con mi
dibujanta (jódete Pérez Reverte), preparando lo que puedo de la nueva edición de las Novelda Rolea y…
Bueno, creo que no está mal.
Resumiendo:
Aunque ya no me pase tanto como antes por aquí, no es por no estar si no por no
poder. Seguir sigo y cuando pueda… podré.
Que
final más raro me ha quedado…
Si al menos has retomado el rol y los juegos de mesa son buenas noticias. Seguro que esas partidas te dan inspiración para nuevas entradas.
ResponderEliminarSi. Si inspiración no me falta. El problema es que cuando me siento a escribir dejo estos temas para el final y acaban quedando en el olvido.
EliminarEldarad, qué gran campaña de RQ jugué ahí.
ResponderEliminarYo soy un gran defensor de Eldarad. Me parece un suplemento muy completo. No es Pavis... de acuerdo, pero sigue siendo un buen libro.
EliminarPero Eldarad no es Glorantha ¿verdad? Lo digo porque Eldarad está en castellano.
ResponderEliminarEldarad no es Glorantha, pero en la intro del libro te explican como adaptarlo y realmente es muy muy sencillo.
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