Llevaba ya bastante tiempo sin reseñar ninguno de los antiguos suplementos de Ravenloft y aunque podáis pensar que la causa de esta ausencia se deba a mi natural pereza y desánimo, la realidad es que pensaba hablar de este módulo y no tenía muy claro como enfocarlo. Y es que Adam’s Wrath, o el homenaje al gran Frankensteis de Mary Shelley que sacaron para Ravenloft es una aventura odiada por algunos, que la tildan de “railroading” y amada por otros (entre los que me encuentro) ya que se aleja de los tópicos mazmorreros y los jugadores no dejan de sorprenderse y maldecir al dungeon master durante toda la partida. Así que voy a proceder a destriparla (ojo spoilers, pero eso ya lo sabéis) para tratar de que manipular vuestra opinión en mi favor. ¿Vamos allá? Pues vamos allá.
El cómo el cuando y el quien:
Adam’s wrath fue escrita por Lisa Smedman, autora de múltiples artículos en la revista Dragón, aventuras para Dungeons & Dragons y novelas varias, y publicada en el año 1994, justo después de la caja roja, siendo la primera aventura oficial de la renovación de la campaña original. La portada es de Doug Steward y las ilustraciones interiores en blanco y negro de Mark Nelson. Como era habitual se presentó en formato libreto de sesenta y cuatro páginas sin grapar las cubiertas y con un mapa a color desplegable en su interior.
El argumento:
La cosa empieza regular para los jugadores, ya que nada más abrir el telón éstos se encuentran en un barco atrapado en medio de una tormenta dirigiéndose a toda leche y sin control alguna hacia unos afilados arrecifes. Se alienta en este punto al dungeon master a describir con todo detalle las horribles muertes de los aventureros ante los desesperados jugadores que no podrán hacer otra cosa que tirar dados y revisar sus fichas en busca de algo que les salve. Pero como en Ravenloft la muerte no suele ser el final de nada, despertarán de nuevo.
En el laboratorio del Dr. Mordenheim descubrirán que sus cuerpos han sido sustituidos por constructos de carne en los que se han preservado sus cerebros para la futura reinserción en clones creados por el científico loco. Ahí empieza la primera parte de la aventura en la que el amable doctor les pide a los jugadores que le ayuden a recuperar a su esposa, secuestrada por un terrible monstruo, Adan, su propia creación. Y así, usando unos poderosos cuerpos que no son suyos, empieza un periplo que les lleva a descubrir que ni el doctor es tan buena persona, ni ese monstruo tan monstruoso, ni ellos las únicas creaciones de tan terrible ciencia. Y ahí el debate interno, pues si no colaboran con el doctor no recuperan sus cuerpos, pero si lo hacen quizás tampoco y además estarán cometiendo un acto vil y despreciable.
¿Lograrán los desgraciados aventureros terminar la aventura vivos? ¿Pero vivos y con sus cuerpos? ¿Pero vivos y con sus cuerpos y salvando a la bella dama? ¿Pero vivos y con sus cuerpos y salv..? Bueno, creo que ya se ha entendido.
El contenido:
Además del libro propiamente dicho, con un anexo que incluye algunas páginas de compendio de monstruos, la parte interior de la cubierta contiene mapas en blanco y negro de la mansión del doctor y del monasterio de los golems, mientras que el mapa desplegable nos muestra varias localizaciones de la partida tales como la guarida de Adam, el hogar de una bruja marina, la zona del naufragio o los misteriosos niveles inferiores de las montañas de la Bestia Dormida. Así como un mapa detallado de Lamordia, dominio en el que transcurre toda la acción.Conclusiones:
Es cierto que durante toda la aventura los jugadores pueden decidir pocas cosas y que al final se convierte en un corre corre que nos pillan en el que tratarán de sobrevivir lo primero y tomar decisiones trascendentales lo segundo y quizás ni eso, pero los múltiples giros de guion, las situaciones extrañas en las que se verán metidos (porque perder sus cuerpos y jugar con otras hojas de personaje es solo el principio) y el terrible descubrimiento del final harán que recuerden este módulo durante mucho tiempo. Y para todos los que lo tildan de lineal y que se sienten frustrados por no poder desarrollar en él las complejas personalidades de sus personajes, recordarles que aquí se viene a pasarlo bien y comer panchitos y que todo lo demás es secundario. Un abrazo.
Esos giros de guión suenan bien. No conocía esa aventura (quizás por lo mal que nos llevamos el inglés y yo).
ResponderEliminarPero la conclusión me ha encantado:"recordarles que aquí se viene a pasarlo bien y comer panchitos y que todo lo demás es secundario". Amén.
Así es. Que a veces se nos olvida que los juegos son precisamente eso y nos metemos en guerras.
EliminarGracias por pasarte y comentar, amigo.