domingo, 25 de marzo de 2012

El rol "de verdad": Videojuegos parte 6

En contrapartida a sus compañeros japoneses, los diseñadores de videojuegos yankis buscaban la forma de simular una partida de rol de mesa en el ordenador; Para ello no valía el limitarse a crear un juego cualquiera con una ambientación genuinamente rolera, como el Al-Quadium (o como se escriba) o el Ravenloft (en un dificilísimo juego de acción en primera persona), sino que había que ir un poco más allá; Y ese más allá se llamó Baldur’s Gate.
El juego, que salió en la era de los procesadores Pentium1, no solo estaba basado en el Dungeons and Dragons, en el mundo de Toril (Reinos Olvidados), sino que el mismo sistema de juego era el del manual del Advanced Dungeons & Dragons. Para jugar a ese bonito juego había que comenzar por el principio: Creando un personaje exactamente igual que el creado en una partida de mesa, ir viviendo aventurillas, subiendo de nivel, encontrando compañeros y tomando decisiones más o menos trascendentes para la trama. No era una experiencia puramente rolera (estabas solo en tu casa como un perro abandonado y el juego tenía muchas limitaciones tanto de interpretación como de juego), pero se parecía bastante. Al BG1 le siguió el Icewind Dale, el BG2 ID2, el Torment… y un largo etcétera. Y es que la formula había funcionado.
A partir de ese punto los juegos fueron mejorando gráficamente y se incorporaron nuevas ambientaciones; Surgieron títulos interesantes como los primeros Fallout, el impresionante (e impresionantemente menospreciado) Arcanum o la saga Elder Scrolls y otros bastante sobrevalorados, como el Neverwinter Nights, con un multijugador excelente pero una campaña para un jugador más aburrida que un partido de fútbol.
Estos juegos, dejando aparte cosas técnicas y artísticas, me abrieron los ojos a un nuevo modo de enfocar mis campañas de rol en mesa. Hasta el momento me había limitado a jugar partidas sueltas, sin apenas conexión entre ellas y con los personajes moviéndose por una gran extensión del mapa. A partir de ese momento decidí concentrar las partidas en una pequeña extensión mientras se iba desarrollando una trama más compleja. No es ninguna novedad en el mundo del rol, pero a mi nunca se me había ocurrido.
En el lado positivo podemos destacar que este tipo de juegos proporcionan muchas horas de juego, tramas elaboradas y multitud de secretos y encuentros divertidos.
En el lado negativo, ese “quiero y no puedo” en el que a veces nos encontramos cuando queremos hacer algo como llamar a una puerta, y el diseñador del juego no contó con esa lógica posibilidad.. Frustrante.
En fin, para muchos el Magic fue el causante de la caída en desgracia del rol, pero os recuerdo que estos juegos surgieron en la misma época y que a veces en la calle hace mucho frío y apetece más quedarse en casita, con un vaso de cacaolat jugando al ordenador.

El BG1 solo permitía alcanzar le nivel 6, asi que estos bonitos encuentros draconianos quedaban reservados para la segunda parte.

4 comentarios:

  1. Voy a probar ese Arcanum, tete. Gracias!!

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  2. El Arcanum te puede decepcionar por su aspecto gráfico, pero es el único juego al que he jugado que cada encuentro puede resolverse de trws o cuatro formas diferentes. Aqui no es necesario ser un guerrero para acabar con los monstruos, ya que puedes ser un comerciante sin habilidades con armas o una cortesana y llegar hasta el final con otras artes.

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  3. Muy buen artículo y muy sabia la reflexión final sobre el vicio y su relación con la caída del rol.

    Yo nunca he sido mucho de juegos de ordenador, pero leyendo una entrada como ésta pienso que a lo mejor me he perdido algo.

    Una de mis dudas era si un juego de ordenador podía merecer realmente las horas que te sueles pasar jugando, y si podían, aunque fuera de forma limitada, emular una partida de rol, y tu artículo me ha hecho pensar que así es.

    Yo la sensación más parecida a una partida de rol con juegos de ordenador, ha sido una tarde jugando al World of Warcraft con mi grupo rolero habitual, todos hablando por el Skype, y la verdad es que por unos instantes me sentí como si realmente estuviera inmerso en una aventura. Fue la pera, pero no es lo mismo, principalmente por algo parecido a lo que dices de "llamar a la puerta": la flexibilidad que exige el que ha probado el rol es lo que nos falta en estos juegos.

    A mi también me ha dejado pensativo lo del Arcanum... me lo apunto.

    Un saludo!

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  4. Baldur´s Gate es el mejor juego "ever" de la historia mundial mundialísima! Que grandes ratos....
    Aquí sí estaremos de acuerdo y no en lo del heroquest...

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