Debido al éxito sin precedentes cosechado por mis anteriores publicaciones sobre "El Cuervo", voy a escribir sobre otro personaje, algo mas mediático pero con alguna relación con el anterior. Espero que os guste tanto o igual que mis anteriores reseñas a cómics.
Allá por el año 1994 llegaron a España la primera oleada de
comics de una nueva editorial llamada Image. Esta editorial había sido creada
por varios autores, dibujantes de éxito en Marvel o DC que estando cansados de
su trabajo de “mercenarios del lápiz y la tinta”, decidieron embarcarse en sus
propios proyectos, creando personajes desde cero y asumiendo el control total
de dibujo, guion y derechos de sus propias colecciones.
Eric Larsen creó a Savage Dragon, una especie de hulk
policía; Rob Liefeld (el que dibuja músculos pectorales como zeppelines) creó
un supergrupo estilo “Vengadores” llamado Youngblood; El (a mi parecer)
sobrevalorado Jim Lee, hizo lo propio con los Wildcats y Todd McFarlane, famoso
por sus dibujos de Batman y Spiderman creó al antihéroe Spawn, un hombre
atormentado por la pérdida de su esposa que regresaba al mundo tras pactar con
el diablo, acarreando una maldición que le impedía estar con ella.
Había muchos otros personajes como Deathblow, Shadowhawk,
los héroes adolescentes de Gen13, y un largo etcétera, pero fue este Spawn el
que me fascinó, no solo por la vistosa portada y el título brillante que
ostentaba ese primer número (aunque yo tenía 13 años y debo reconocer que era
altamente impresionable), sino por la humanidad de un personaje a su vez tan
poco humano.
La portada original de ese primer número con el título brillantito.
¿Quien podría resistirse?
El autor decidió volcar sus propios miedos en la colección,
hablando de la familia, los hijos, el cáncer, la muerte y la incertidumbre
hacia el mas allá, y parece que todo ello no solo me atrapó a mi, ya que Spawn
se convirtió en un superéxito de ventas en todo el mundo.
Han pasado casi 20 años desde que comencé a seguir al
engendro de la capa y he decidido releer la colección (que sigo comprándome,
aunque ya de forma algo esporádica), y en futuras entradas voy a hablar del
cómic, el personaje y su evolución. Espero no hacerme muy pesado aunque ya
sabéis, si no os gusta algo siempre podis poner porno, que para algo estamos en
internet.
Gran cómic, ahora te hace falta una entrada para Bastard jeje a no ser que ya tengas una entrada y no la haya visto.
ResponderEliminarUn cómic excelente aunque no mejor que los de Deathblow(¡¡Jejeje!!, Y yo voy y me lo creo...) del cual se hizo una película pésima. Una verdadera lástima.
ResponderEliminarCasi no recuerdo de qué iba Deathblow, aunque si recuerdo que era bastante atípico, más parecido a una novela gráfica que a un cómic. En futuras entradas hablaré del cómic en si y como no, de la película. De Bastard ya veremos, ya que la colección creo que quedó cancelada al final.
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