domingo, 12 de octubre de 2014

Reglas caseras: Las montañas de la locura

Hace muy poquito os hablé del juego de tablero de Fanhunter que iba de matar primigenios a base de cartas y fichas; y aunque el juego me gustó, ya dije que le faltaba algo para mi gusto y que lo iba a desarrollar en breve. Y así lo hice; creé unas reglas caseras para aderezar el juego un poquito pero por motivos de pereza, no las había subido todavía. Pero hoy es el día. Hoy, 12 de octubre, mientras los ciudadanos de bien salen a las calles a venerar la bandera, yo he decidido sacrificarme y escribiros esto. De nada.

Regla opcional 1:
Habilidades especiales de los equipos.


Como ya sabréis, disponemos de cinco equipos de tres miniaturas cada uno para elegir: Ingenieros, infantería, macutes, arqueólogos y oficiales. Desgraciadamente, las reglas del juego los tratan a todos por igual y la elección se queda en algo puramente estético. Para solventar este sinsabor, aquí van mis habilidades especiales para cada equipo.

Ingenieros  (Evitar la catástrofe): Los ingenieros son la po… la host… bueno, que saben como arreglar cosas y hacer que otras funcionen bien. A efectos de juego, cualquier ficha de “boum” que caiga en una casilla ocupada por un ingeniero, puede ser desviada a una casilla de barco adyacente, a elección del jugador que controla al ingeniero. En caso de que la casilla adyacente esté ocupada por otro ingeniero, ya no se podría  volver a desviar (no coloquéis a los tres ingenieros juntos, hombres).

Infantería (Fuego de represión): Estos tipos son especialistas en disparar y saben cómo mantener a raya a sus enemigos. A efectos de juego, cualquier primigenio que se encuentre en el mismo “carril” que un miembro de infantería y se vea beneficiado por una ficha de “Movimiento +2”, no podrá avanzar.

Tintines (Idiotez): Los tintín macutes no van para arquitectos; de hecho, son tan estúpidos que posiblemente no sepan ni a qué se enfrentan ni quiénes son. Por ello las fichas de pérdida de cordura no afectarán a este jugador.

Arqueólogos (Rebuscar en la basura): Acostumbrados a sacar de donde parece que no hay, el jugador arqueólogo podrá, una vez por partida, descartarse de las cuatro cartas de su mano (5 en modo un jugador) en lugar de las dos que permiten las reglas.

Oficiales (Movimiento estratégico): Los oficiales no se cuentan entre los más valientes del mundo, así que han desarrollado técnicas para esconderse del peligro; por ello, cada vez que un monstruo se mueva a su misma fila debido al efecto de una ficha de movimiento lateral, el oficial podrá cambiar su posición a la fila que ocupaba antes el monstruo. Sobra decir que en caso de que otro monstruo haya movido a esa segunda fila, el oficial no podrá repetir el movimiento, faltaría más.

Regla opcional 2:
El Señuelo (solo 1 jugador) 

Como ya habrá notado quien haya jugado en solitario a esto, ganar la partida con un solo equipo resulta algo más que difícil a pesar de que las reglas del juego nos permiten tener en la mano una carta adicional en todo momento. Es por ello que para facilitarnos las cosas, añadiremos al equipo elegido la ficha de personaje que está en blanco (sí, en la caja viene una ficha de personaje en blanco, míralo bien y verás). Esta ficha representará un señuelo situado allí para despistar a las horribles bestias demás allá del espacio y del tiempo y actuará como un cuarto miembro del equipo a todos los efectos (colocación en el tablero, recibir daño, etc…) con las siguientes excepciones:
1: El señuelo no podrá mover con cartas de movimiento.
2: El señuelo no se beneficiará de las reglas especiales del equipo (ver arriba)
3: El señuelo no se considerará un explorador a la hora de determinar la victoria; es decir, si nos matan a los tres exploradores, hemos perdido aunque el señuelo siga en pie.
Y 4: El señuelo siempre será prioritario a la hora de determinar en qué dirección se mueve un monstruo que ha alcanzado el barco en caso de encontrarse a la misma distancia de éste y un explorador. Esto es porque le ponen unas feromonas que atraen a los primigenios. Las venden en las droguerías, creo.

Y esto es todo. Ya me contaréis si alguien decide aplicarlas. Yo lo he hecho, pero no tengo más ganas de escribir.

2 comentarios:

  1. Buenaaaas...
    No tengo el juego, así que cabe la remota posibilidad de que no fuera el más indicado del mundo para opinar... pero oye, suena genial!!! ;P
    Eso sí, me da a mí que se dice "Fuego de Supresion" y no "Fuego de Represión"
    Será que tal día como hoy (con tanto desfile militar y todo eso) nos traiciona un poco el subconsciente... ;D
    Nos leemos, socio
    El muy ladino...

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  2. Gracias por tu comentario compatriota (por seguir con el tema).
    El juego no lo tienes porque no quieres, ya que está bastante bien y no es demasiado caro.
    Y lo del fuego de supresión lo sabía (no sé como podéis dudar de mí), pero me pareció más mejor llamarlo de la otra forma.
    Un saludo.

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