Hellgate: London

Este videojuego con perspectiva en primera persona y corte futurista-demoníaco apareció en 2007 de la mano de Bill Roper, creador de títulos míticos como la saga Warcraft o los dos primeros Diablo. Se cuenta que tras el éxito arrollador del Diablo2, Bill Roper comenzó a pensar en la tercera parte del juego y en darle un giro a la perspectiva del mismo. 

Armas de fuego o de acero; Todo vale para repeler a los demonios.

En Hellgate, London, se cuenta como una serie de puertas al infierno comienzan a abrirse por toda la capital británica, convirtiendo la ciudad en una ruina infestada de demonios que nosotros deberemos ir eliminando a base de tiros, espada y magia. La temática, en el fondo, viene a ser la misma que en el Diablo: Muchos enemigos, muchas armas, árboles de habilidades y objetos que engarzar para mejorar nuestro equipo, subir niveles y matar más monstruos. La acción se desarrolla en el complejo del metro de Londres, donde se refugian los escasos supervivientes de la ciudad y que a su vez hace de mazmorra moderna y que posee todos los elementos que hicieron popular al Diablo, tales como enemigos aleatorios, objetos normales, mágicos, especiales y únicos, gemas, tesoros etc… Y de vez en cuando tendremos la oportunidad de salir al exterior y seguir nuestra caza de demonios por las calles devastadas de la ciudad, donde podremos visitar algunos de los lugares emblemáticos de la capital británica tales como el “Big Beng”, la “Kinghtsbrigde” o el “Centraslquaremarketgarden”. ¿Se nota que no he estado en mi reputa vida en Londres y que ni siquiera me he tomado la miserable molestia de documentarme un poco? Pues ni falta que hacía porque…

Demonios y fuego del infierno en las calles de Londres.

Cualquier arma es pequeña cuando los zombies pasean por tu barrio

 Los clásicos "bollos" de enemigos que llenan toda la pantalla.

Aunque la intención era buena, al bueno de Bill Roper no le permitieron llevar a cabo su proyecto debido al tremendo éxito que estaba cosechando Blizzard con su World Of Warcraft y éste se marchó a otra compañía en la que poder llevar a cabo su proyecto donde, por ironías de la vida le (o se) exigieron (o exigió) demasiada celeridad y finalmente el juego vio la luz sin llegar a estar del todo pulido y ello hizo que su calidad se viera notablemente reducida; El combate cuerpo a cuerpo parecía una exhibición cutre de patinaje sobre hielo amateur, algunos enemigos eran prácticamente invencibles si no jugabas con un tipo determinado de personaje y la acción en general acababa siendo repetitiva y con un aire mediocre que, aunque a mi suele gustarme, hacía que el resultado final estuviese condenado al olvido.

Una verdadera lástima ya que el juego podría haber sido uno de los grandes.